Hacía tiempo que un amigo me había dado los cuatro primeros libros de la saga Crónicas vampíricas de la escritora Anne Rice. Siempre pensaba que el siguiente libro que me iba a leer sería éste, pero al final cuando tenía que elegir mi siguiente lectura había otro que se interponía en el camino. Finalmente, después de mucho tiempo muerto en la estantería, me he leído: Entrevista con el vampiro.
Paso olímpicamente de hacer ninguna crítica del libro por diferentes razones: La primera porque el libro tiene sus años y en internet debe haber millones de entradas de otros blogs sobre la puñetera novela. La segunda es porque, encima, hay una película basada en el libro que tuvo mucho éxito por allá el siglo pasado, por lo tanto en internet ya habrá millones de entradas hablando de la película y su adaptación fidedigna o no con la novela. Y tercera, pero no por ello menos importante, es porque soy un vago y no tengo memoria así que me da palo escribir sobre ello y no me acuerdo de nada de lo que pasa en el libro (que básicamente es lo mismo que me sucede con cualquier crítica a cualquier libro que he escrito en el resto de entradas del blog).
Lo que sí voy a hablar es de una cosa muy chorra que me sucede cuando leo un libro después de ver la película (supongo que no seré el único que le suceda). Me explico... El film lo vi por televisión poco tiempo después de su estreno en cine, supongo que por el canal+ o en vídeo (dios que viejuno). El libro lo he leído después de ver la película y, aunque lo he hecho como 20 años después de su visionado, al leer la novela no veía a los personajes que me describía la autora, en mi mente aparecía la imagen de un joven Tom Cruise, a un raruno Antonio Banderas y a una niñísima Kristen Dunst dando su primer beso en la boca a su ídolo Brad Pitt. Anne Rice ya podría haber escrito 4 páginas describiendo el aspecto de Lestat como a un jugador de baloncesto de 2 metros, de 200 kg de peso y tan negro como el azabache que en mi mente aparecería el nenaza de Cruise. Que el libro puede explicar que la niña es muy pero que muy menor pero yo continúo viendo a la actriz Kristen Dunst (que jovencita era pero un poco crecidita ya estaba la pobre). ¡Cuanto daño hace el cine y que fuertes y duraderas son sus imágenes!
Joder, realmente es una mierda leer el libro con tantas imágenes ya preestablecidas en tu puto cerebro. No lo disfrutas de la misma manera que si fueras completamente virgen. Yo quiero imaginarme a otro Lestat ¡leches! ¡Puto invento el del cinematógrafo! ¡Los libros no tienen nada que hacer, a la que la gente descubra las salas de cine la literatura se irá a pique!
A pesar de todo ello, hablando del libro, diremos que está entretenido y se lee de un tirón (toma crítica sesuda). Es por ello que puedo asegurar que en la lista de lecturas pendientes ya he puesto el resto de títulos de la saga... aunque seguramente tardaré en leerlos, ya que, si tengo que ser sincero, me he vendido todos los libros de las crónicas vampíricas que tenía y con el dinero me he comprado otros libros completamente diferentes. Sí, no tengo ningún puto criterio.
Paso olímpicamente de hacer ninguna crítica del libro por diferentes razones: La primera porque el libro tiene sus años y en internet debe haber millones de entradas de otros blogs sobre la puñetera novela. La segunda es porque, encima, hay una película basada en el libro que tuvo mucho éxito por allá el siglo pasado, por lo tanto en internet ya habrá millones de entradas hablando de la película y su adaptación fidedigna o no con la novela. Y tercera, pero no por ello menos importante, es porque soy un vago y no tengo memoria así que me da palo escribir sobre ello y no me acuerdo de nada de lo que pasa en el libro (que básicamente es lo mismo que me sucede con cualquier crítica a cualquier libro que he escrito en el resto de entradas del blog).
Lo que sí voy a hablar es de una cosa muy chorra que me sucede cuando leo un libro después de ver la película (supongo que no seré el único que le suceda). Me explico... El film lo vi por televisión poco tiempo después de su estreno en cine, supongo que por el canal+ o en vídeo (dios que viejuno). El libro lo he leído después de ver la película y, aunque lo he hecho como 20 años después de su visionado, al leer la novela no veía a los personajes que me describía la autora, en mi mente aparecía la imagen de un joven Tom Cruise, a un raruno Antonio Banderas y a una niñísima Kristen Dunst dando su primer beso en la boca a su ídolo Brad Pitt. Anne Rice ya podría haber escrito 4 páginas describiendo el aspecto de Lestat como a un jugador de baloncesto de 2 metros, de 200 kg de peso y tan negro como el azabache que en mi mente aparecería el nenaza de Cruise. Que el libro puede explicar que la niña es muy pero que muy menor pero yo continúo viendo a la actriz Kristen Dunst (que jovencita era pero un poco crecidita ya estaba la pobre). ¡Cuanto daño hace el cine y que fuertes y duraderas son sus imágenes!
Joder, realmente es una mierda leer el libro con tantas imágenes ya preestablecidas en tu puto cerebro. No lo disfrutas de la misma manera que si fueras completamente virgen. Yo quiero imaginarme a otro Lestat ¡leches! ¡Puto invento el del cinematógrafo! ¡Los libros no tienen nada que hacer, a la que la gente descubra las salas de cine la literatura se irá a pique!
A pesar de todo ello, hablando del libro, diremos que está entretenido y se lee de un tirón (toma crítica sesuda). Es por ello que puedo asegurar que en la lista de lecturas pendientes ya he puesto el resto de títulos de la saga... aunque seguramente tardaré en leerlos, ya que, si tengo que ser sincero, me he vendido todos los libros de las crónicas vampíricas que tenía y con el dinero me he comprado otros libros completamente diferentes. Sí, no tengo ningún puto criterio.